La pregunta de si puedes controlar el estrés mientras organizas tu propia Boda, es un planteamiento errado, la realidad es que nos generamos la mayor parte del estrés nosotros mismos cuando creamos expectativas no realistas.
Algunos aspectos de tu entorno también te causan estrés, pero tú tienes el control de cómo te afectan y debes buscar herramientas para reducir su efecto en ti.

A todas nuestras parejas les preguntamos en la primera reunión qué es lo que más quieren en la Boda, eso que no puede faltar, aunque sea más costoso o difícil de conseguir, porque es importante que no lo dejes por fuera y trabajar en reducir otras cosas menos relevantes…pero….oh sorpresa, cuando comienza a involucrarse la familia, muchos nos piden eliminar esto de la lista.
Les cuento este ejemplo, porque tienen que crear una estrategia que les permita convivir con las decisiones personales y las que se basan en complacer un poco a nuestras familias. Esto puede genera run clima rígido, estrés y decepciones que se acumulan durante los meses de planeación. El resultado es una bomba de tiempo que no va a terminar bien.
Mi recomendación es que se enfoquen en estos puntos:
-Define que personas quieres que participen de las decisiones importantes de la Boda
-Deja claro desde el principio el alcance de sus opiniones, así evitarás tensiones innecesarias en cada paso de la planeación
-Asígnales tareas que los mantengan ocupados, que los haga sentir importantes y que para ti no sean cruciales. Así consigues que estén contentos, que se sientan parte importante de tu día y que se enfoquen en algo que no te causa preocupación. Se creativa con esto y véndeles la idea con emoción.
-Si decides que no participen en ningún aspecto, por la razón que sea, debes comunicarlo al comienzo. Si no lo haces, lo que tú crees que es una decisión privada, te va a alcanzar en cualquier momento, porque solo lo sabes tú y la otra persona tiene sus propios pensamientos.
Luego de tener este punto aclarado, hay otras cosas causan ese estrés no deseado si no se manejan bien y que debemos aclarar desde el comienzo:
-Tener una idea clara de cómo quieres que sea tu Boda realmente. No solo lo que ves en redes, también lo que veas al cerrar los ojos y pensar en ella.
-Fíjate un presupuesto estimado y realista. Es súper importante para que tomes las mejores decisiones y puedas invertirlo, primero en tus prioridades y luego en tu lista de deseos.
-Calcula cuanto tiempo le puedes dedicar a todas las actividades de la organización. Cuando sepas esto, podrás decidir si tienes capacidad para hacerlo sola, si necesitas ayuda de tu familia, o si lo mejor es contratar a un experto que pueda dedicarse 100% a tu Boda.
-Entiende la Boda como un proyecto. Antes de empezar a investigar o pedir presupuestos, escribe todo lo que necesitas buscar y contratar, los tiempos que tienes para hacerlo, fíjate ciertas metas. Así puedes hacerlo de forma organizada, en gran parte se trata de minimizar riesgos para que todo fluya mejor.
Recuerda que tu controlas como te afecta todo lo que sucede.
Disfruta del camino!